Los detalles cuentan


Estando en éste proceso de encontrar la plenitud, hace unos días me encontré un verdadero tesoro que quiero compartírselos…encontré un podcast BUENÍSIMO, que tiene un mood muy cool y encaja  perfecto con todas las personas cool que me leen, pero como lo mejor siempre va al final, los invito a seguir leyendo.

Éste podcast en uno de sus capítulos habla acerca de la felicidad, y menciona que para determinar tu nivel de felicidad existen 3 factores: la genética (en un 50%), las circunstancias (en un 10%) y la actividad deliberada, es decir tu actitud (en un 40%). La verdad a mi me sorprendió que la genética tuviese algo que ver con nuestra capacidad de ser felices o no. Sin embargo, tal y como la autora del podcast lo mencionaba, es solamente la mitad. El 40% nos corresponde a nosotros, a nuestra forma de ver la vida, a nuestra forma de procesar las circunstancias y las situaciones por las que vivimos día a día (las cuales únicamente forman el 10%). Y en fin, en esta entrada no les vengo a hacer un resumen sobre ese capítulo del podcast, ese se los dejaré al final para que uds. Mismos puedan escucharlo.

Como les había comentado anteriormente, yo había sido una persona que sufrió de muchas inseguridades de adolescente, e incluso de adulta muchas veces llegué a dejar que las circunstancias me dominaran y decidieran por mí si debo o no debo ser feliz, pero tal como lo repito siempre, la felicidad es un trabajo de autodescubrimiento DIARIO. No se trata de que seas un robot computarizado y programado para sonreir 24/7 o para solamente decir “frases positivas” y ser el roll model de ser humano “bueno”, porque en la vida jamás dejarán de existir problemas, jamás dejarás de equivocarte, jamás las personas dejarán de fallarte o de juzgarte, y lo cierto es, que esas cosas NO las podemos controlar, pero lo que sí podemos controlar, es cómo reaccionar ante ellas.

Para no hablar solamente “paja”, les pondré un ejemplo personal: hace 1 semana y 4 días, se metieron los ladrones a la oficina de mi empresa (sí, la que les comenté la vez pasada). En el momento en que nos dimos cuenta de lo sucedido, obviamente me sentí muy desanimada, incluso pasé el día siguiente básicamente en cama todo el día y con la batería de mis ánimos al 0%. Lo que robaron no fue tan significativo, y por supuesto, lo más importante es que no hubo daños humanos, sin embargo, no deja de ser frustrante que el fruto de tu trabajo y tu sudor simplemente se esfume de un día para otro. Al  final, se tomaron las medidas necesarias para mejorar la seguridad pero ésta es la parte linda de éste proceso: Yo, soy fiel creyente de Dios, y aunque no soy perfecta, ni tal vez la más religiosa o santa, creo que todo en esta vida tiene un propósito y que Él permite que las piezas adecuadas se muevan para tu vida, al final de todo hasta en la biblia lo dice: Él nos ha dado vida para que la vivamos en abundancia.

Les cuento que una semana después habíamos recuperado parte de lo que fue robado (la diferencia fue en centavos nada más), y además de ello, Dios me permitió exactamente una semana después llenarme de motivación y vibra positiva en un evento. Éste evento se realizó el 9 de marzo y estaba dirigido para mujeres emprendedoras/empresarias y estaba organizado por una gran mujer, a la cual yo admiro muchísimo en redes sociales y la cual me inspira a ser más exigente conmigo misma en mi rol de mujer, yo había querido asistir a este evento desde el momento que se promocionó y por diferentes razones desistí de ir (entre ellas la inversión que requería), pues resulta ser que un día antes del evento (es decir el día de la mujer) me regalaron una entrada GRATIS…¿Pueden creerlo?...

En la vida se requiere más que una actitud positiva, porque habrán momentos como éstos o peores (cada quién sabe lo que vive en su día a día) que te van a botar los ánimos ¡Y ESTÁ BIEN!, está bien llorar, está bien no quererse levantar de la cama, está bien estar triste o enojado o frustrado, lo que no está bien es quererse quedar así toda la vida.

¡La vida es hermosa!, y déjenme decirles: ¡LOS DETALLES CUENTAN!, porque si estamos inmersos en eso malo que nos pasa jamás podremos identificar las cosas lindas, esos detalles que solamente con ojos de amor se pueden ver: Un atardecer, la luna, las estrellas,  El olor de las flores (por más cursi que se escuche), El abrazo de tu mamá, un beso de tu pareja o de tus seres queridos, una risa entre amigos, el cantar de los pájaros…o ese evento al que tanto querías ir y que Dios te regaló la oportunidad de asistir.

¡La vida es muy COOL para no fijarse en todos los detalles que la conforman! ¡Aprendamos a apreciarlos!


PD: El podcast que les conté se llama CON AMOR CARAJO, acá les comparto el link de spotify: https://open.spotify.com/episode/5wgifukeqPwPIDTqnHFD4N  (se los recomiendo, a mi me ha ayudado muchísimo como guía en este camino de la felicidad)


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