El trabajo de tu vida


En el día internacional del trabajador, quise por supuesto conmemorar ésta fecha hablando un poquito sobre aquello que hacemos todos los días muchas veces de forma mecánica.

Hay una frase, que es súper trillada pero que igualmente me encanta porque tiene mucha verdad en ella y es la siguiente: “Elige un trabajo que te guste, y no tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida” –Confucio.

Y bueno, como les decía, pienso profundamente que PARTE de esta frase es muy verdadera, y es que verdaderamente si hacemos aquello que amamos, eso nos edificará como personas y hará que queramos dar más del 100% de nosotros mismos y que en ese proceso, disfrutemos ese esfuerzo, pero ojo aca...ESE ESFUERZO...y eso es porque realmente aunque nos fascine con todo nuestro corazón lo que hagamos y lo disfrutemos, no quiere decir literalmente que no vamos a trabajar, o que eso no requerirá un esfuerzo, por el contrario probablemente trabajemos más que nunca pero no se sentirá como una carga porque sabremos qué es lo mejor que estamos haciendo.

He conocido muchas personas, que se encuentran frustradas con sus puestos laborales, sin embargo llevan ahí años simplemente soportando el estrés y básicamente “sobreviviendo”. Es obvio que en nuestro país (El Salvador) la situación laboral y económica es muy difícil y tal vez no se encuentre el “trabajo soñado” donde al salir de la Universidad podás ganar inmediatamente $1,000 y es que para encontrar o hablar del verdadero trabajo soñado vamos a hablar antes de las 2 actitudes que se tienen ante el trabajo en general:

1. Tienes el peor trabajo del mundo pero no haces nada para cambiar la situación: existen puestos laborales que son realmente desgastantes, en donde existe un ambiente tóxico, donde te deshumanizan y te tratan como una máquina más, donde trabajas 12 horas (o más) diarias y el salario es inferior para la carga laboral...donde te pasas quejando día y noche, donde tu sonrisa se borró y hasta sueñas que pones la renuncia, sin embargo...nunca lo haces. Y esto es TAN real, y no hablo de aquellas personas que se esmeran en su trabajo a pesar de lo difícil que es y que aunque no estén conformes pues lo hacen con la mayor sonrisa, y también luchan A DIARIO para encontrar una oportunidad mejor...no, no hablo de ellas, hablo de aquellas personas que se quejan y se quejan y  se quejan...de aquellas que a duras penas y respiran y sin embargo no hacen NADA al respecto...aquellas que nunca han ni siquiera pensado en la posibilidad de cambiarse de trabajo, aquellas que solo le dejan “al destino” una mejor oportunidad laboral, como si se les fuese a aparecer enfrente de sus ojos por arte de magia. Tener un trabajo que no ayude a tu desarrollo profesional y personal hasta cierto punto es normal, inevitable y todos hemos pasado por eso, sin embargo está en nuestras manos si ese puesto laboral será una oportunidad para mejorar como personas y encontrar algo que se ajuste a nuestras necesidades o si será algo que nos defina de por vida.

2. Ya tienes el trabajo de tus sueños, pero no te das cuenta: Ahora bien, existen ooootro tipo de actitud frente al trabajo y es que ya tienes el trabajo de tus sueños, ese por el que tanto luchaste, ese trabajo que haces justo lo que te gusta, ese trabajo que te tratan como parte de la familia y donde además y por supuesto la remuneración monetaria es la que muchos desean, sin embargo...te sigues quejando, quejando y quejando, por lo que sigue siendo el peor trabajo del mundo, porque te produce estrés, solamente que ésta vez de carácter innecesario...o peor aún, no cumples con tus tareas laborales por simple comodidad...mientras muchos desean tener el trabajo que tú tienes, tú no te has dado cuenta que realmente es una bendición.

Al final de cuentas ningún trabajo es perfecto o color de rosa, y en éste día en especial se trata de recordar eso, que a pesar que no es el trabajo perfecto, TODO dependerá de la actitud con la que lo tomes: Si es un ambiente laboral hostil, pues mírale el lado bueno, te está haciendo más fuerte, sin embargo no te quedes solo con el lado bueno, sino que también decídete a realizar cambios. Y por otra parte, si ya tienes el trabajo perfecto pues entonces ¡APROVECHALO, NO LO DESPERDICIES!, agradece día a día, sonríe, toma una actitud positiva frente al mismo y da TODO de ti en él.

Yo por mi parte al fin encontré el trabajo de vida, y es trabajar por mis sueños y lo considero un éxito y no porque sea millonaría (aún), sino porque me llena, me reta, me ayuda a crecer como persona  y principalmente...me hace feliz.

Les he dicho que soy una mujer de fe, ¿cierto?, bueno, hay una cita bíblica que me encanta y que trata precisamente de dar SIEMPRE lo mejor de nosotros en cada una de nuestras acciones y en donde se resume TODO este post...así que acá se las dejo:

"Por lo tanto, ya coman, beban o hagan lo que sea, háganlo todo para gloria de Dios."  1º Carta a los Corintios, 10 –


¡Hasta la próxima! ;)

Comentarios

  1. ¡Que buenísimo post! Es cierto que muchas veces no valoramos la bendición que tenemos porque vemos las cosas siempre desde el lado negativo. Que refrescante y alegre es leerte, como siempre sigues superandote cada semana. Sigue así :)

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Sea como sea muchas veces las cosas mejoran con actitud. No se trata de que todo salga siempre bien si no de verle el mejor lado a las cosas. ¡Gracias por tu apoyo!, espero que sigas compartiendo éste camino junto a mí ;)

      Borrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Crónica de 10 meses

Todos somos AVENGERS

Lo que he aprendido...