La ley de la igualdad
No amigos, tranquilos no vengo a hablar de igualdad de género (aunque debería hacerlo porque es un tema sumamente importante, en especial en nuestro país...pero lo dejaremos para otro día)...
El día de hoy quiero hablarles de nuestras exigencias con otros y de nuestra "buenítis". No sé si a uds. les ha pasado pero a mi me pasa casi siempre y en todos los roles en los que me desempeño.
¿Recuerdan que anteriormente habíamos hablado de expectativas?...en ese post yo les comentaba que una debilidad que tengo es el manejo de mis expectativas, ante la vida y ante las personas...(https://thecoolgirlsv.blogspot.com/2019/07/que-esperar-cuando-esperasdemasiado.html )
Bueno, pues el tema de hoy está muy relacionado...y es que resulta ser que muchas veces medimos a las personas y sus comportamientos con una regla personalizada PARA NOSOTROS, en base a NUESTRAS EXPECTATIVAS y se nos olvida pensar primero: ¿Cómo soy yo?...
Y es que el tema de hoy no solamente se trata del hecho de no esperar demasiado de la gente, o de no juzgar. Si no de algo tan basico que a si no es que a TODOS por lo menos a la mayoría nos enseñan y es TRATAR A OTROS COMO TE GUSTARÍA QUE TE TRATEN A TÍ.
Cuántas veces vamos por la vida deseando el o la mejor amiga, el mejor esposo/a, la mejor hermana, el mejor compañero de trabajo o de universidad...pero, ¿acaso nosotros lo somos?. ¿Somos la mejor pareja? ¿el mejor amigo/a? ¿somos en realidad el mejor compañero de trabajo que alguien puede tener? ¿Somos lo que nosotros mismos esperamos de los demás?....
No sé uds. pero yo en lo personal respondería NO a todas...No sé si es porque mis expectativas son muy altas o porque mi comportamiento en diferentes roles es un poco mediocre; lo cierto es que al pensar que si soy lo que yo deseo ver en los demás, casual que la respuesta es negativa. Y éste análisis, no es en realidad para ponernos a llorar y sentirnos como malas personas, al final y al cabo somos humanos y no existe nadie PERFECTO. Se trata más bien de identificar en qué áreas podemos mejorar para alcanzar nuestra mejor versión.
Hoy por hoy no soy una mujer perfecta, pero al menos trato de pensar cómo me gustaría que me tratara mi novio, mi familia, mis amigos, un desconocido en una tienda...etc. Y no, no siempre soy perfecta, no siempre sonrío, no siempre logro contener el enojo de una queja, no siempre logro contener el juzgar a alguien....pero al menos he empezado por ponerme en los zapatos del otro de vez en cuando. Al final de cuentas, con algo se empieza ¿no?.
Preguntémonos entonces...
¡Hasta la próxima! 😉
Hoy por hoy no soy una mujer perfecta, pero al menos trato de pensar cómo me gustaría que me tratara mi novio, mi familia, mis amigos, un desconocido en una tienda...etc. Y no, no siempre soy perfecta, no siempre sonrío, no siempre logro contener el enojo de una queja, no siempre logro contener el juzgar a alguien....pero al menos he empezado por ponerme en los zapatos del otro de vez en cuando. Al final de cuentas, con algo se empieza ¿no?.
Preguntémonos entonces...
- Cuando estamos en medio de una pelea o un disgusto con nuestra pareja....¿cómo nos gustaría que nos tratara? ¿Somos nosotros ese tipo de persona?.
- Cuando pensamos que nuestros amigos no están cuando los necesitamos...¿Estamos siendo nosotros diferentes?
- Cuando queremos que nuestros familiares nos entiendan...¿Los estamos entendiendo nosotros a ellos?
Y así sucesivamente en TODAS las áreas de nuestra vida. ¿Qué estamos haciendo nosotros?...
¿Por qué reflexionar ésto?...acá les dejo la razón perfecta y el origen de la frase que nos dicen en casa a todos:
"12.«Por tanto, todo cuanto queráis que os hagan los hombres, hacédselo también vosotros a ellos; porque ésta es la Ley y los Profetas."
Mateo, 7 - Bíblia Católica Onlinehttps://www.bibliacatolica.com.br/la-biblia-de-jerusalen/mateo/7/Pensar en los demás también es pensar en nosotros, es pensar en una mejor versión de nosotros, así que iniciemos HOY ;).
¡Hasta la próxima! 😉
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