Lobos con piel de oveja...
Había una vez...
Un lobo que quería conseguir lo que él quería a toda costa, pero en su condición de lobo sabía que no lo lograría, es decir...¿Quién no le tiene miedo o le huye a un lobo?. Entonces el lobo muy astutamente decidió disfrazarse para poder ocultar su condición de depredador.
Pensó:
-¿Qué animal es presa y que sea confiable para la sociedad en general?
Y se le ocurrió:
-¡Claro!, la oveja...¿Quién no ama las ovejas?...se ven incluso hasta adorables con su lana suavecita y cara inocente.
Entonces, se disfrazó de oveja. Y lo logró...Logró engañar a todos con su traje de presa (cuando por dentro era un depredador). Pasaron los días, semanas, meses y hasta años; y nadie supo quién era en verdad. Hasta que un día, su traje estaba TAN desgastado de tanto utilizarlo, que al pasar muy rápido por el marco de una puerta su traje se rasgó...y quedó al desnudo su identidad: UN LOBO DEPREDADOR...fingiendo ser una oveja.
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¿Cuántas veces hemos visto esta misma historia (cuento o como le querrás llamar), en la vida real? ¿Cuántas veces nos relacionamos con ovejas que en realidad son lobos?...
¿Cuántas veces NOSOTROS somos ese lobo usando un disfraz que no es la realidad?...
Me atrevería a decir que todos los días de nuestra vida hemos visto casos así (ya sea en nosotros mismos o en alguien más).
¿Qué implica ser un lobo vestido de oveja?
Significa fingir una personalidad falsa con fines totalmente egoístas con tal de ser aceptados en la sociedad. Y lo cierto es, que quizá todos lo hemos hecho en algún momento.
Usar un disfraz significa mentir. Mentirte a tí mismo, y mentirle a las personas que tienes alrededor. Y pensando en esto, te quiero hacer una pregunta...
¿Alguna vez has mentido?
Si tu respuesta es NO, que te lleven con todo y zapatos al cielo porque sos un Santo en la tierra...Y es que TODOS en algún momento hemos dicho alguna mentira, ya sea una "mentira blanca" o alguna de verdad estilo Rosa de Guadalupe...
La persona con la que estuve saliendo, me mintió durante mucho tiempo y esa situación me ha llevado a preguntarme realmente, ¿por qué mentimos?, ¿es necesario mentir?.
- Evitar una respuesta negativa de alguién.
- Evitar defraudar a alguien.
- Evitar el rechazo de alguien o de la sociedad en general.
- Lograr algo que queremos sin obstáculos.
- No estabas siendo egoísta, porque por el contrario no querías hacer daño a nadie más.
- No te importa lo que digan los demás ni el rechazo de la gente...
Hoy por hoy, ésta experiencia me ha hecho reevaluar mi forma de ser con los demás, me ha hecho reevaluar cada vez que digo una mentira (por más "chiquita" que sea), porque verdaderamente, no quiero ser como el lobo. No quiero quedarme "sin disfraz", quiero por el contrario, que el día que yo me muera, la gente me recuerde por lo que yo verdaderamente fui en vida, y no por lo que creía ser.
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