¿Por qué nos conformamos?

¿Alguna vez les ha pasado, que se quedan con "lo menos peor", o con un "por lo menos..."? ¿Alguna vez les ha pasado, que se conforman con lo mínimo que les da la vida?...¿Que viven en modo SOBREVIVIENDO y no viviendo?...

Porque a mi sí...Quizá más veces de las que debería acordarme. Pero sí, me he conformado con:
  • Relaciones mediocres (amorosas y amistosas).
  • Trabajos o clientes tóxicos.
  • Justicia o verdades a medias.
  • Entre otras...
Éstas por supuesto, son las situaciones en las que yo me he conformado con lo externo o lo que no puedo controlar de la vida. Han habido otras tantas, en las que me he conformado con la peor versión de mí misma también. Me he conformado:
  • Dar lo mínimo de mí en cualquier rol de mi vida.
  • Hacer únicamente el esfuerzo mínimo en cualquier actividad.
  • Decir verdades a medias.
  • Amarme a medias...
Y en éstos días...pensando en qué básicamente ya llegamos a la mitad del 2021, pensé en los propósitos de año nuevo, y en cuántas veces nos pasa cualquiera de las 2 siguientes opciones:
  1. Nos conformamos con lo que nos da la vida (y ni siquiera nos ponemos propósitos a inicio de año).
  2. Nos conformamos con haber hecho lo mínimo (cumplimos 1 o dos propósitos durante 1 mes y luego abandonamos todos).
¿Por qué hacemos esto? ¿Por qué nos conformamos a ser lo mínimo que podemos ser...o lo que podemos hacer?...En lo personal, creo que nos conformamos por miedo a hacer cambios en nuestra vida. Por miedo a ser diferentes...Al menos ese siempre ha sido mi miedo: el cambio.

Lo curioso,  es que yo siempre he tenido el sueño de ser una persona integral y creo que es un anhelo que vive en el corazón de absolutamente todos, porque ese deseo profundo de ser nuestra mejor versión posible, es en realidad, el anhelo divino de santidad. Y éste significado de ser "integral" va más allá de la perfección programada que te impone la sociedad (el tener, hacer o ser X cosa a X edad). 

Éste anhelo de ser integrales, de ser nuestra mejor versión posible y por ende de plenitud vive en nosotros como la gracia de Dios para llamarnos hacia su camino. Y obvio, como seres humanos en general y jóvenes en específico, resulta ser bastante difícil ver este anhelo a simple vista.

Hoy, en último miércoles del 5 mes del año, me dí a la tarea de leer mis propósitos de año nuevo, y también de unas metas nuevas que me propuse estando en terapia. ¿Y saben qué?, he cumplido casi todo con lo que me he propuesto.

Y no, esto no es para alardear que soy la persona más organizada, integral o mejor del universo. Por el contrario, esto es para contarles, que tuve que pasar por una situación emocionalmente traumática, y por darme con la cara en el suelo, para entender que nunca voy a ser mi mejor versión haciendo las cosas como a mi se me da la gana.

Durante muchos años siempre quise ser ésta persona integral y tener sobre todas las cosas una grandiosa relación con Dios...CON MIS CONDICIONES. Y heme acá, que evidentemente NO me funcionó. Y tuve que darme cuenta en el día del amor que no iba a lograr NADA en la vida si no me entregaba plenamente así como Él se entregó por mí.

Y no amigos, no me haré religiosa...
Y tampoco significa que ya sea Santa o perfecta. Como tampoco significa o implica que solo en la iglesia vivo, o que no salga, no tome, no me ría, no baile o no me divierta con mis amigos.

Significa que tuve que estar literalmente dípas en el suelo, y sin querer comer, bañarme, o vivir en general, para darme cuenta que no quiero eso.
  • Quiero una vida en abundancia.
  • Quiero hacer TODO CON AMOR
  • Quiero cumplir un propósito GRANDE en esta vida para prepararme para la siguiente.
Hoy por hoy, he logrado lo siguiente:
  • Tener una mejoría en mi salud mental. 
  • Tener disciplina para hacer de mis días algo productivo y también saber cuándo descansar sin sentirme culpable.}
  • Enfocarme en la salud física de mi cuerpo, dejando lado estereotipos de cómo se ve un cuerpo "saludable".
  • Tener mayor conexión con mi familia y sentirme plena por eso.
  • Mantener relaciones amistosas saludables, y a las que no sencillamente las he soltado.
  • Tener una mejor relación con Dios (aunque aún me falta muchísimo😅)
  • Tener mayor orden con mis finanzas (aunque aún a años luz de estar donde debería...pero cada paso cuenta).
& Lo mejor de todo....tener paz, aún cuando me siento aún rota.


Así que hoy por hoy, quiero hacerte una invitación: ¡NO TE CONFORMES!. Porque estamos hechos para la plenitud, y si eso que estás haciendo, viviendo, pensando, aceptando, trabajando, etc. NO TE HACE FELIZ, no es ahí....

No te conformes con el trabajo mediocre, no te conformes con relaciones interpersonales que no te aportan nada, no te conformes con cosas que te quiten la paz, y por supuesto, no te conformes con tu versión mediocre o con lo poco que podes darle a la vida,

¡ESTAMOS HECHOS PARA COSAS GRANDES!

Cool vibes😉

Comentarios

Entradas más populares de este blog

Crónica de 10 meses

Todos somos AVENGERS

Lo que he aprendido...