Me voy...

Ésta pandemia nos ha hecho cambiar nuestras vidas radicalmente, y una de esas cosas ha sido la forma de relacionarnos. 

Cómo les he dicho anteriormente, tengo 2 hermanas mayores. Ambas son mis cómplices, socias, amigas y compañeras de vida. Sin embargo, tengo el alma partida en 2 permanentemente, ya que una de ellas (la de en medio) vive fuera del país. Sin embargo, de alguna forma Dios siempre nos ha dado la oportunidad de vernos al menos 1 vez al año.

La última vez que ví a mi hermana y mis sobrinos fue hace 1 año y 11 meses lo cual para nosotras es básicamente una eternidad. 

Éste año, además de la pandemia, personalmente como ya lo saben, ha traido muchísimos cambios que jamás imaginé en mi vida pero que estoy abrazando tanto porque definitivamente me están convirtiendo en mi mejor versión.

Y es que no sé si alguna vez han escuchado éste dicho de que después de que la vida se te parte en dos, de alguna la forma la vida SIEMPRE devuelve. Pues en mi caso, me ha devuelto el triple.

En este proceso de sanación y de reecontrarme conmigo misma, he tenido la oportunidad de:

  • Iniciar un proceso de terapia psicológica (que debería haber emepezado hace años)
  • Volver a enfocarme en mi salúd física a través de ejercicio (que nunca dejé de hacer pero que ahora tengo la oportunidad que volví al tipo de ejercicio que tanto amo: entrenamiento funcional) y también de alimentación saludable.
  • Enfocarme de nuevo en mi apariencia  y velar por consentirme con cosas que parecen superficiales pero que son parte del amor propio.
  • Poder entregarme completamente a los servicios que tengo asignados en mi iglesia.
  • Dar lo mejor de mí para el manejo de redes sociales  (a lo que también me dedico y el cual he descubierto que amo).
  • Invertir de forma inteligente: y entre esas inversiones fue de un día a otro decir: TENGO QUE VER A MI HERMANA, compré el boleto....y sí, me voy.

Me voy para despejar mi mente.
Me voy para encontrarme entre risas con mi hermana y mis sobrinos
Me voy para ver paisajes y admirar la grandeza de Dios.
Me voy para llorar lo que tenga que llorar con mi hermana.
Me voy para estar sola en el viaje.
Me voy porque parte de la salud mental es también cuidar las relaciones de quiénes amamos.

Y nah, tranquilos, no me voy para siempre, solo serán un par de días de perderme para encontrarme💓

PD. Solo como dato...uds. me están haciendo mejor persona también. En medio de las lágrimas que he llorado de escribir los últimos post les digo que no tengo palabras por hacer el simple hecho de leerme: ¡GRACIAS!.

Comentarios

  1. Primero Dios esté viaje despeje tu mente y podas seguir encontrandote. De esa manera tendremos muchas más historias que leer que en lo personal me ayudan mucho. ¡Feliz viaje!

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    1. Gracias Lizz! Definitivamente esto de encontrarse es una cosa de todos los días. Pero cambiar de ambiente fijo que sirve. Bendiciones!

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