The cool girl

Ella vivía en la ciudad. Era de altura promedio, tenía el escultural y típico cuerpo de latina (casi casi podría apostar que sus medidas se acercaban al tan deseado 90-60-90).  Su cabello era negro azabache, tenía ojos un poco almendrados, profundos como el océano, color café oscuro.  Era la primera de dos hijos; cargaba con la responsabilidad de ser la "hermana mayor". Siempre correcta, siempre seria, siempre haciendo lo correcto: se mataba estudiando (por eso siempre tenía notas excelentes), era sumamente responsable y trataba de ser la mejor en todo. Tenía 24 años, estaba estudiando Ingeniería Química en una universidad privada del país (una de las mejores catalogadas, por cierto). Su familia no era de dinero, pero tenían comodidades y no les hacía falta nada. Él, había nacido en un pequeño pueblo en las afueras de la ciudad. Su estatura era abajo del promedio. Su cabello, hacía juego con la época (estilo Elvis Presly), el color de sus ojos era un cafe tan

Más de 15 horas de vuelo lo valían todo, todo por estar aquí. Aún en mi claustrofobia de ir en un avión tantas horas, podía sentir cada vez más cerca la sensación de estar ahí. Desperté sintiendome renovada. Me senté analizando el lugar donde realmente estaba. Me levanté y salí al balcón. Había un olor en el ambiente inigualable, era una combinación de olor a pan recién horneado y olor único a primavera. Llevo el amor en la sangre. He vivido enamorada del amor durante toda mi vida y de esa fantasía de estar en un lugar donde se sienta esa magia. Quizá por eso amo tanto este lugar. Decidí ir a caminar y obvio visitar la torre más importante del lugar. Era invierno, así que había un frío del carajo. Pero no me importaba. No me importaba parecer esquimal cuando aún todos vestían con abrigos ligeros. Estar ahí, ver las luces, el ambiente navideño, la sensación de amor, de fiestas, de mi mejor época, lo valía todo. Comencé a subir en esa torre, y sentí como si no hubiese gr

 "Hay recuerdos que el tiempo no borra. El tiempo no hace la pérdida olvidable, solo superable" -Cassandra Clare. Fue un sábado 27 de septiembre de 2014. Eran alrededor de las 10-11am. Yo estaba en último ciclo de la universidad (a pocos meses de egresar). En ese entonces, en la Matías, al estudiar comunicaciones, debías escoger 1 área de especialización en la carrera; ésta especialización la estudiabas en los ultimos 2 años de carrera, yendo a clases los sábados. Yo me especialicé en Publicidad y Marketing. Ese sábado, como todos, yo estaba en clases de la especialización, sin embargo, ese día teníamos una actactividad especial en el rancho navarra. Estábamos aprendiendo sobre la raza de perros PASTOR ALEMÁN, para preparar una campaña luego (sinceramente no recuerdo el qué). Y ahí estaba yo, al aire libre, bromeando con amigos, conociendo todo sobre...¿perros?... Mi celular sonó, contesté. Sinceramente no recuerdo qué me dijeron, cómo me lo dijeron...ni siquiera r

¿Se han puesto a pensar en la diferencia entre felicidad y alegría?... A veces, aunque sepamos los significados, en la vida real todo parece traslaparse.  Pero en español se los dejo acá: "felicidad es un estado permanente , sinónimo de prosperidad o dicha. La alegría es un estado pasajero , sinónimo de júbilo, bienestar o gozo." (Fuente: https://www.diferenciador.com/diferencia-entre-felicidad-y-alegria/#:~:text=La%20diferencia%20entre%20felicidad%20y,de%20j%C3%BAbilo%2C%20bienestar%20o%20gozo.  ) Leer "estado permanente" me hace pensar inmediatamente en una persona con un emoji sonriente pegado en la cara... y consecuentemente me dan nauseas. Es decir....¿"permanente"?... Y entonces entendí que a lo mejor permanente no significa único. Y para ilustrarles mi forma de pensar, les voy a citar una frase  de una de mis películas favoritas (Sex and the City), cuando a una de las personajes se le pregunta si es feliz todos los días, ella responde

Estaba sentada en la mesa del comedor, con la laptop encendida, con una hoja en blanco en la pantalla. A la par, tenía una de mis libretas favoritas: La de pasta dura, en color dorado, con letras blancas al estilo lettering con la leyenda: BOSS LADY. Tenía un lapicero  en la mano, apoyado entre el dedo índice y dedo medio; lo movía de un lado a otro, golpeando la libreta. Como siempre, con audífonos, escuchando The Weekend. Mordiéndome el labio inferior. Perdida...sin tiempo, ni espacio. ¿Por qué diablos cuesta tanto escribir sobre lo que se supone me sé de perfección?. Hoy, no voy a escribir sobre un sueño, sobre una emoción, sobre una situación o un evento. Hoy, simplemente quiero que me conozcan mejor. Sí, a mi. A la persona que está detrás de las letras. A la persona que está atrás de los eventos. A la persona que está atrás de las rutinas de ejercicio, o los videos motivacionales, o incluso los videos bailando. La persona que está atrás del preset  de fotos color rosa